Versión de HTML Básico
¿Entiende lo que lee?
69
históricas y no viceversa. Algo que comúnmente se olvida al interpretar profecías
como la de las siete trompetas, pasaje donde algunos han llegado al punto de
“encontrar” la predicción de una tercera guerra mundial, armamento nuclear incluido.
Cuando Dios se refería a algo más:
tipología bíblica
Basados en el contenido bíblico, la tipología puede definirse como el estudio de
las personas, eventos, o instituciones en la historia de la salvación, designados por
Dios para prefigurar y predecir el cumplimiento escatológico de ciertos elementos
relacionados con la obra y la persona Cristo.
En otras palabras, un
tipo
esencialmente es una profecía, pero no expresada
en palabras, sino en forma dramatizada, esto es, representada por la vida de ciertos
personajes, eventos o instituciones del Antiguo Testamento. Así, a diferencia de
Miqueas 5:2 donde se profetiza: “Pero tú, Belén Efrata… de ti me saldrá el que será
Señor en Israel…”, son las acciones de Moisés, algunos aspectos de su vida, las que
anticipan de forma tipológica la obra de Cristo, el gran libertador del pueblo de Dios de
todos los tiempos (Deut. 18:15; Ose. 11:1; Mat. 2:15). Por su parte, el evento del
éxodo adquiere una dimensión mayor, a saber, la de señalar la liberación final del
pueblo de Dios (Apoc. 15:1-3-16:21), mientras que el santuario terrenal y sus ritos
claramente representan a Cristo y a su ministerio celestial (Heb. 8:5).
En suma, las características principales de la tipología bíblica son las
siguientes:
1. La tipología está enraizada en la historia, es decir, no pasa por alto la
realidad histórica de las personas o instituciones con las que trata. Por lo tanto, no
cae en el rango de la alegoría.
2. Un tipo es una prefiguración de carácter obviamente predictivo. En esto se
diferencia de un simple símbolo. Sin embargo, un símbolo puede llegar a convertirse
en un tipo al ser utilizado en un contexto que así lo requiera. Por ejemplo, el símbolo
de un cordero en la Biblia puede significar inocencia, pero conectado con el santuario,
el cordero llega a ser un
símbolo-tipo
del Cordero de Dios, del Mesías.
3. El tipo tiene como complemento una verdad mucho más grande que la
original, el cual se denomina
antitipo
. Tal característica se debe a que la función de un
tipo es divinamente designada. Así, aunque hay muchas situaciones similares o