Página 56 - Comentario bíblico adventista del séptimo día tomo Apocalips

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modo que ella controle la vida y santifique el carácter. El Espíritu del Señor está en acción
para tomar la verdad de la Palabra inspirada e imprimirla en el alma, de modo que los
verdaderos seguidores de Cristo tengan un gozo santo y sagrado que podrán impartir a otros.
El tiempo oportuno para que nosotros trabajemos es ahora, precisamente ahora, mientras
dura el día. Pero no se le or 431 dena a nadie que escudriñe las Escrituras para afirmar, si
fuera posible, cuándo terminará el tiempo de gracia. Dios no tiene un mensaje tal para labios
mortales de ninguna clase. No quiere que una lengua mortal declare lo que él ha ocultado en
sus concilios secretos (RH 9- 10- 1894).
13.
Ver EGW com. 1 Cor. 15: 22, 45.
13-17 (cap. 1: 8).
El Alfa y la Omega de las Escrituras.-
[Se cita Apoc. 22: 13-17.] Aquí tenemos el Alfa del Génesis y la Omega del Apocalipsis. Se
pronuncia una bendición para todos los que guardan los mandamientos de Dios y que
cooperan con él en la proclamación del mensaje del tercer ángel (RH 8- 6- 1897).
14 (cap. 20: 12-13; ver EGW com. Gén. 3: 22-24; Rom. 3: 31; 2 Cor. 3: 7-11).
La ciudad de Dios para los observadores de los mandamientos.-
Nadie que haya tenido la luz de la verdad entrará en la ciudad de Dios como violador de los
mandamientos. La ley divina está en el mismo fundamento de su gobierno en la tierra y en el
cielo. Si los hombres a sabiendas han pisoteado y han despreciado la ley de Dios en la
tierra, no serán llevados al cielo para que allí hagan lo mismo; no habrá cambio de carácter
cuando Cristo venga. La edificación del carácter continuará durante las horas del tiempo de
gracia. Día tras día son registradas las acciones en los libros del cielo, y los hombres
recibirán su merecido en el gran día de Dios de acuerdo con sus obras. Entonces se verá
quién recibe la bendición. Bienaventurados los que guardan sus mandamientos, para que su
potencia sea en el árbol de la vida, y que entren por las puertas en la ciudad" (RH 25- 8-
1885).
(Col. 1: 26-27.)
Viaje en la vida futura.-
Muchos parecen tener la idea de que este mundo y las mansiones celestiales constituyen el
universo de Dios. No es así. La multitud de los redimidos viajará de un mundo a otro mundo,
y mucho de su tiempo será empleado en escudriñar los misterios de la redención. Y a través
de toda la extensión de la eternidad, este tema estará continuamente siendo expuesto ante
sus mentes. Los privilegios de los que venzan por la sangre del Cordero y por la palabra del
testimonio de ellos, están más allá de toda comprensión (RH 9- 3- 1886).
17.
Ver EGW com. cap. 3: 20; Rom. 3: 20-31.
19.
Ver EGW com. cap. 20: 12-15.
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