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Segundo, resulta razonable suponer que la pérdida de autoridad
dentro de la familia afectará la capacidad de un niño para vivir bajo
autoridad en la sociedad. Los padres que proveen un liderazgo
fuerte y con propósito enseñan a sus hijos a vivir con la verdadera
autoridad y a aceptarla. Un niño que desarrolla su personalidad en
una atmósfera que espera de él confianza, lealtad y honra, está bien
encaminado a una vida responsable en una sociedad cuya salud
depende de la confianza mutua, las lealtades fuertes y una crítica
cautela ante todos los reclamos de autoridad. Los padres permisivos
privan a la sociedad de personas capacitadas para distinguir la
autoridad genuina de sus imitaciones.
Boszormenyi-Nagy y Spark, en un profundo estudio de los
ligamentos que mantienen unida a la familia, observan
adecuadamente que "finalmente nuestra sociedad se verá agobiada
por ciudadanos resentidos y justificadamente desleales en tanto los
hijos sean gestados masivamente por padres que no tienen la
intención de cuidar de ellos o son emocionalmente incapaces de
hacerlo".9
Al no haber vivido nunca con verdadera autoridad, los jóvenes
no están preparados para entrar en un mundo donde los
pretendientes a la autoridad compiten por el control del espíritu
humano. "Las familias débiles —observa Peter Berger—producen
individuos desarraigados, inseguros de su dirección y, por eso, en
busca de alguna autoridad";10podríamos añadir que la encuentran
en sustitutos autoritarios demasiado dispuestos no sólo a guiar sino
también a controlar.
El carácter de una familia cambia radicalmente cuando los pa
dres renuncian a su autoridad. En vez de ser una comunidad, en la
que la lealtad mantiene unida a las personas en confianza mutua,
se convierte en un grupo casual de individuos que compiten por el
afecto y los servicios de quienes hicieron los arreglos para que
vinieran al mundo; un conglomerado de personas, siempre al borde
de la crisis, con horarios y citas al estilo "si sale bien, bien; sino,
mala suerte", que a veces se odian, a veces se aman, pero que tienen
que soportarse mutuamente porque todos necesitan comida y
hospedaje. En medio de este tipo de alianza accidental, el
mandamientobíblico aparece como una promesa de amor ordenado.
B. La esencia de la autoridad
Para entender la autoridad paterna, tenemos que mirar la esencia
de la autoridad misma. La autoridad paterna es una especie de
Moralidad y nada más
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