En cuanto a un comentario sobre la palabra "misterio", cf. com. Apoc. 1: 20; cf. com. Rom. 11:
25. Jesús usó una frase similar: "el misterio del reino de Dios" (Mar 4: 11), y Pablo también
habla del "misterio de Dios" (Col. 2: 2), y el "misterio de Cristo" (Col. 4: 3). El misterio de Dios,
que él revela a sus hijos, es su propósito para con ellos: el plan de salvación. Cf. 1 Tim. 3: 16;
2 JT 374.
Se consumará.
Ver com. cap. 11: 15.
Sus siervos los profetas.
La declaración y exposición del "misterio de Dios" (ver com. 11 "el misterio de Dios") ha sido
siempre la misión de sus siervos los profetas en sus mensajes para los hombres (ver com.
Rom. 3: 21).
8.
La voz.
Sin duda la voz que le había prohibido a Juan que escribiera lo que habían declarado los
siete truenos (vers. 4), como lo demuestra la repetición de las frases "del cielo" y "otra vez".
Ve y toma.
Se le ordena a Juan que tome parte en la visión.
El librito.
Ver com. vers. 2
Abierto
Ver com. vers. 2.
En la mano.
Ver. com vers.2
El mar.. la tierra.
Ver com. vers. 2.
9.
Me diese.
Juan es colocado en una situación en la expresa su deseo de tener el libro. Desempeña el
papel de los que proclamaron el mensaje adventista en los años 1840-1844. Aunque
equivocados en cuanto al tiempo del acontecimiento que proclamaban, sin embargo fueron
dirigidos por Dios, y el mensaje del pronto advenimiento fue precioso para sus almas. Su
cómputo de la cronología profético de Dan. 8: 14 era correcto (ver el comentario respectivo),
pero están equivocados en cuanto a la naturaleza del acontecimiento que debía suceder al
final de los 2.300 días.
Cómelo.
Compárese con el simbolismo de Eze. 3: 1 (cf. Jer. 15: 16) Comerse el libro es una figura de
lenguaje que representaba la plena comprensión del significado del mensaje contenido en el