Página 390 - Comentario bíblico adventista del séptimo día tomo Apocalips

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El reino milenario será con Cristo en el cielo, no en la tierra como lo afirman muchos
intérpretes de la Biblia (ver com. vers. 2; ver la segunda Nota Adicional 894 al final de este
capítulo).
Mil años.
Ver com. vers. 2.
5.
Los otros muertos.
Es obvio que se refiere a los impíos muertos, los que desde el principio del mundo han
muerto sin Cristo y los que perecieron durante la segunda venida de Cristo. Esto es más
claro aún porque todos los muertos justos participarán en la primera resurrección. Por lo
tanto, "los otros muertos" tienen que ser los impíos muertos (ver com. vers. 2). Algunos MSS
omiten la frase "pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años",
pero la evidencia textual establece su inclusión. De todos modos la doctrina de la segunda
resurrección -implícita claramente en este capítulo- no depende de esta declaración. Si las
naciones tienen que unirse con Satanás en su ataque contra la santa ciudad (vers. 9), es
necesario que vuelvan a la vida. La frase "segunda resurrección" se deriva de la observación
de que sólo hay dos resurrecciones principales (Juan 5:28-29; Hech. 24:15), y que la
resurrección de los justos se llama la "primera resurrección" (ver com. Apoc. 20:2, 4).
La oración "pero los otros muertos no volvieron a vivir hasta que se cumplieron mil años",
constituye un paréntesis. La frase que sigue: "Esta es la primera resurrección", se relaciona
directamente con la resurrección mencionada en el vers. 4.
Hay un estudio de la evidencia textual en cuanto al vers. 5 en la primera Nota Adicional al
final de este capítulo.
Primera resurrección.
Es decir, la mencionada en el vers. 4 (ver el comentario respectivo).
6.
Bienaventurado.
Gr.
makários
(ver com. Mat. 5:3).
Santo.
Gr.
hágios
(ver coro. Rom. 1:7).
La segunda muerte.
O sea la muerte que sufrirán los impíos después de su resurrección al final de los mil años
(vers. 14; cap. 2 l: S). La primera muerte es la que le sobreviene a todos (1 Cor. 15:22; Heb.
9:27). Todos, tanto los justos como los impíos, serán resucitados de esta primera muerte
(Juan 5:28-29). Los justos saldrán de sus tumbas a la inmortalidad (1 Cor. 15:52-55). Los
impíos serán resucitados para recibir su castigo y morir eternamente (Apoc. 20:9; 21:8). Dios
los destruirá totalmente en el infierno (ver com. Mat. 10:28); los aniquilará. La "segunda
muerte" es algo diametralmente opuesto a una vida eterna en medio de torturas, que según
enseñan muchos será la suerte de los impíos (ver com. Mat. 25:4 l).
Potestad.