los cielos nuevos y la tierra nueva serán creados con los elementos purificados de los cielos
antiguos y de la antigua tierra, y que por lo tanto serán nuevos en calidad, diferentes. Los
cielos nuevos y la tierra nueva son, pues, una re-creación, una formación nueva hecha con
elementos que existen, y no una creación de la nada. Cf. 2 Ped. 3: 13.
Pasaron.
En lo que se refiere a su condición anterior desfigurada. Lo que era perfecto cuando salió de
las manos del Creador, que fue calificado como "bueno en gran manera" (Gén. 1: 31), ha sido
terriblemente desfigurado por el pecado, y no puede permitirse que continúe así a través de
la eternidad.
El mar ya no existía más.
Es decir, los mares como los conocemos ahora no existirán en la nueva creación. Algunos
insisten en que este "mar" simboliza a pueblos, naciones y lenguas (cf. cap. 17: 15); pero si
así fuera, entonces los cielos y la tierra necesariamente tendrían que ser también simbólicos.
Juan simplemente está afirmando que los cielos, la tierra y los mares ya no existirán como los
conocemos ahora (cf. PP 24).
2.
La santa ciudad.
En la antigua Jerusalén estaba el templo, donde Dios podía manifestar su presencia a su
pueblo (1 Rey. 8: 10- 11; 2 Crón. 5: 13-14; 7: 2-3) como lo había hecho desde la puerta del
tabernáculo en el desierto (Exo. 29: 43-46; 40: 34-38). La ciudad de entonces fue descrita
como "santa" (Dan. 9: 24; Mat. 27: 53); pero con el transcurso del tiempo la degradación
espiritual del pueblo de Dios llegó a ser tan grande, que Jesús calificó al templo de "cueva de
ladrones" (Mat. 21: 13) y predijo la caída de la ciudad (Mat. 22: 7; Luc. 21: 20). Pero Dios
promete ahora una nueva clase de Jerusalén, la cual Juan describe como la "Nueva
Jerusalén".
Nueva.
Gr.
kainós
; nuevo en especie y calidad (ver com. vers. 1). Cf. Gál. 4: 26; Heb. 11: 10; 12: 22;
13: 14.
Descender.
Juan contempló en visión el descenso de la ciudad (cf. PP 46).
Del cielo.
Su lugar de origen (cf. cap. 3: 12; 21: 10).
De Dios.
Dios es su autor, su originador, su creador.
Dispuesta.
La palabra que se traduce como "dispuesta", sugiere que la preparación comenzó en el
pasado y fue perfeccionada, de manera que ahora está completamente preparada (cf. CS
703, 706).
Esposa.
La ciudad es presentada aquí como una esposa (ver com. cap. 19: 7).
Ataviada.