Página 50 - Comentario bíblico adventista del séptimo día tomo Apocalips

Versión de HTML Básico

11-16.
Ver EGW com. cap. 16: 13-16.
CAPÍTULO 20
5-6.
Señales de maldición en la segunda resurrección.-
En la primera resurrección todos surgen dotados de lozanía inmortal; pero en la segunda son
visibles en todos las señales de la maldición. Todos surgen de sus tumbas como
descendieron a ellas. Los que vivieron antes del diluvio, surgen con su estatura gigantesca,
más de dos veces el tamaño de los que ahora viven en la tierra, y bien proporcionados. Las
generaciones posteriores al diluvio disminuyeron en estatura (3SG 84-85).
9-10, 14 (Gén. 8: 1; 2 Ped. 3: 10).
La nueva Jerusalén protegida en medio de las llamas.-
Cuando el diluvio de aguas llegó a su altura máxima sobre la tierra, ésta tenía la apariencia
de un lago sin orillas. Cuando Dios finalmente purifique la tierra, parecerá un lago de fuego
sin orillas. Así como Dios protegió el arca en medio de las conmociones del diluvio porque en
ella había ocho personas justas, protegerá a la nueva Jerusalén, donde están todos los fieles
de todos los siglos desde el justo Abel hasta el último santo que vivió. Aunque toda la tierra,
con excepción de aquella parte donde descansa la ciudad, estará envuelta en un mar de
fuego líquido, sin embargo la ciudad será protegida mediante un milagro del Todopoderoso,
como lo fue el arca. Estará a salvo en medio de los elementos devoradores (3SG 87).
12-13 (Dan. 7: 9-10; ver EGW com. Exo. 31: 18; Mat. 5: 21-22, 27-28; 1 Tim. 5:
24-25; Apoc. 11: 1; 22: 14).
La ley de Dios vista en una nueva luz.-
Cuando comience el juicio y todos sean juzgados por las cosas escritas en los libros, la
autoridad de la ley de Dios será considerada en una luz completamente diferente de la que
ahora existe en el mundo cristiano. Satanás ha cegado los ojos de ellos y ha confundido su
entendimiento, así como confundió y cegó a Adán y a Eva y los indujo a la transgresión. La
ley de Jehová es grande así como su autor es grande. En el juicio será reconocida como
santa, justa y buena en todos sus requerimientos. Los que quebrantan esa ley,
comprenderán que tienen una seria cuenta que arreglar con Dios, pues las exigencias de
Dios son decisivas (RH 7- 5- 1901).
(Rom. 3: 19; 7: 12; Jud. 15.)
Todos los mundos son testigos del juicio.-
Cristo quiere que todos comprendan los acontecimientos de su segunda venida. La escena
del juicio tendrá lugar en presencia de todos los mundos, pues en ese juicio será vindicado el
gobierno de Dios y su ley se destacará como "santa, justa y buena". Entonces será decidido
cada caso y se pronunciará sentencia sobre todos. El pecado no parecerá entonces
atractivo, sino que será visto en toda su odiosa magnitud. Todos verán la relación en que se
encuentran con Dios y el uno con el otro ( RH 20-9-1898).
Profundo escudriñamiento del corazón.-