Page 132 - Vengo en Breve1

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Al estudiar la profecía del capítulo 12 y la de Daniel 7, vimos cómo el cuerno
pequeño iba a blasfemar contra Dios al atacar “los tiempos y la ley”. El cumplimiento de
esta profecía ha sido muy preciso, pues la parte de la ley que ha sido objeto especial de
ataque es el cuarto mandamiento, el único que se refiere al tiempo. Éste es el que ordena
la santificación del sábado como día de reposo (Éxo. 20:8-11).
Es más, la Iglesia Católica sostiene que la observancia del domingo es una
evidencia de la autoridad que ella posee. Afirma que los protestantes, al observar el
domingo como día de reposo, están siguiendo una tradición católica, ya que tal
observancia carece de apoyo en las Escrituras. Dice que si en verdad quisieran seguir la
Biblia, tendrían que guardar el sábado.
Las siguientes declaraciones aparecen en el libro católico titulado, ¿Por qué somos
católicos y no protestantes? (Madrid: Ediciones Paulinas, 1953), págs. 65-67:
“P. — ¿Los protestantes, al trabajar en el día de sábado o el séptimo día de la
semana, siguen con ello a las Escrituras como regla de fe?
“R. — No; antes al contrario, no pueden justificar su modo de obrar sino
apoyándose en la Tradición. Trabajando en sábado ellos violan un mandamiento de Dios:
Acuérdate de santificar el sábado’; mandamiento que no aparece abrogado en ninguna
parte de la Escritura.
“P. — ¿La santificación del domingo, como día de reposo, está explícitamente
confirmada en la Escritura?
“R. — No, ciertamente. [...] Decir que se santifica el domingo en memoria de la
Resurrección de Cristo, es afirmar que se obra sin apoyarse para nada en la Escritura; lo
mismo se podría decir que se debe guardar el jueves porque en este día Jesús subió al
cielo y reposó después de la gran obra de la Redención humana. (183)
“P. — ¿No ordena San Pablo a los fieles de Galacia y a los de Corinto que hicieran
la colecta el primer día de la semana?
“R. — Sí, mas eso no abolía la santificación del sábado, ni tampoco que la colecta
se hubiera de hacer en la iglesia, sino simplemente que se depositara en tal día la limosna
en el tesoro de la iglesia.
“P. — ¿Cuál es la conclusión lógica que de esto se desprende?
“R. — Que los protestantes no pueden encontrar ni un solo texto de la Escritura
que determine el día festivo del domingo que ellos celebran. Si se abolió el sábado y se
sustituyó por el domingo, fue sin fundamento alguno en la Escritura”.
Los judíos acusaron a Cristo de blasfemia, “porque —decían— tú, siendo hombre,
te haces Dios” (Juan 10:33). Si es blasfemia para un hombre asumir los derechos de Dios,