3. Su carácter. En toda la Biblia, y especialmente en el Apocalipsis, Cristo aparece
como Cordero. Éste nuevo personaje no es, realmente, un cordero, pero se asemeja en
algunas características a ese animal. (185)
La primera bestia de este capítulo incorpora en su fisonomía elementos de las
bestias anteriores, del leopardo, del oso y del león. Esta, en cambio, es un cordero que no
ha figurado nunca antes como símbolo de una entidad política.
Resumiendo
La potencia mundial representada por esta figura debe surgir alrededor del año
1798, debe establecerse en una tierra nueva, y debe mostrar en su etapa inicial, la
mansedumbre de un cordero.
Examinando los anales de la historia, descubrimos que, en efecto, hay una
potencia mundial que reúne estas características: Estados Unidos de Norteamérica. Este
país surgió en un nuevo continente; no apareció como resultado de invasiones o
revoluciones en alguna de las antiguas civilizaciones europeas. En el año 1789, Estados
Unidos estaba promulgando su constitución, en la cual anunció su carácter de cordero,
pues se presentaba como defensor de los derechos humanos y de la libertad de
conciencia.
Una voz conocida
Pero sorprende que cuando el “cordero” habla, se oye una voz conocida: es la voz
del dragón. Notemos las actividades que se describen a continuación:
Pero hablaba como dragón. Y ejerce toda la autoridad de la primera bestia en
presencia de ella, y hace que la tierra y los moradores de ella adoren a la primera bestia,
cuya herida mortal fue sanada. También hace grandes señales, de tal manera que aun
hace descender fuego del cielo a la tierra delante de los hombres. Engaña a los moradores
de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia,
mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida
de espada y vivió (vers. 11-14). (186)
En estas palabras se revelan actitudes y acciones del “cordero” que están todavía
en el futuro: va a procurar que la gente haga una “imagen a la bestia”. Esto es hablar
“como dragón” porque el dragón, en su tiempo, apoyó a la bestia; inclusive le dio “su
poder y su trono y grande autoridad" (vers. 2).
Además, el falso cordero pronto empieza a utilizar tácticas del dragón, las que se
resumen en dos palabras: engaño y persecución.
Para engañar, realiza “prodigios mentirosos” (2 Tes. 2:9). Inclusive, “hace
descender fuego del cielo a la tierra delante de los hombres”. Se trata de una alusión
histórica. En tiempos del profeta Elías, los falsos profetas quisieron hacer descender fuego