Dolor.
Una gran parte del sufrimiento y la angustia de la vida es resultado del dolor que nos acosa;
pero el dolor será completamente eliminado de aquel hermoso mundo del mañana.
Las primeras cosas.
Es decir, las condiciones actuales pasarán. No habrá nada con el estigma de la maldición
(cap. 22: 3).
5.
El que estaba sentado.
No se dice quién es (cf. com. cap. 20: 11). En el cap. 4: 2 se presenta al Padre sentado en el
trono, y esto mismo puede estar implícito aquí. Algunos citan a Mat. 25: 31 como una
evidencia de que puede referirse a Jesucristo.
He aquí.
El que habla llama la atención a algo importante que está por revelarse.
Nuevas.
Gr.
kainós
(ver com. vers. 1)
Todas las cosas.
No quedará nada que tenga el estigma de la maldición (cf. cap. 22: 3).
Escribe.
Ver com. cap. 1: 11. Esta orden se le repite a Juan en diferentes momentos mientras estaba
en visión (cap. 1: 19; 2: 1; 14: 13; etc.).
Fieles y verdaderas.
Es decir, auténticas y dignas de confianza. Las palabras y las promesas de Dios son
completamente dignas de confianza, y por lo tanto se puede estar seguro de ellas (cap. 22:
6).
6.
Hecho está.
Mejor "han sucedido", pues el verbo está en el plural; es decir, estas cosas han concluido.
Algunos MSS dicen: "he llegado a ser Alfa y Omega. . ." Lo que Dios había prometido por
medio de sus santos profetas y su pueblo justo había anticipado con ansiosa expectativa,
finalmente será realidad. La visión anticipada que se le dio a Juan es una garantía de la
realización final que todavía debe efectuarse.
El Alfa y la Omega.
Ver com. cap. 1: 8.
Al que tuviere sed.
El verdadero creyente no tiene deseos de acumular bienes en este mundo, de ser rico en
riquezas terrenales. Su anhelo es beber abundantemente de las riquezas espirituales que
provienen de Dios.