17.
El Espíritu.
El Espíritu Santo es el que imparte energía a la vida cristiana de los creyentes, es el que les
da el poder para vivir la vida victoriosa, para vencer al diablo y pasar sanos y salvos a través
del tiempo de angustia.
La Esposa.
Sin duda es la misma figura del cap. 21: 9-10 (ver el comentario respectivo).
Dicen.
O "están diciendo", o "siguen diciendo".
Ven.
La mayoría de los comentadores considera que "ven" es una respuesta a la promesa de
Jesús en el vers. 12: "He aquí, yo vengo pronto"; que se le está pidiendo a Cristo que cumpla
su promesa. Esta es una posible interpretación; pero también es posible entender la
invitación como una exhortación al mundo incrédulo para que acepte el Evangelio.
El que oye.
El número singular designa a cada uno, individualmente. Los hombres serán salvos como
individuos, no como iglesias o congregaciones. La salvación es algo estrictamente personal.
Akóu
Ç
, la palabra que en el NT se traduce "oye", generalmente lleva implícito el pensamiento
de oír eficazmente, es decir, de oír y obedecer el mensaje que se oye. Aquí tiene este mismo
significado. La exhortación podrán repetirla únicamente los que oyen y aceptan el mensaje.
Ver com. Mat. 7: 24.
Diga.
El singular sugiere que cada miembro de iglesia como individuo debe añadir su clamor de
bienvenida, manifestando así su vehemente anhelo de la segunda venida y su deseo de que
otros gocen de las bendiciones de Cristo.
Tiene sed.
O ansias por las cosas de Dios (cf. cap. 21: 6). Ver com. Mat. 5: 6.
Venga.
Una exhortación para cada alma necesitada a fin de que aproveche la promesa del cap. 21:
6.
El que quiera.
El ofrecimiento es universal. Nadie está excluido de las posibilidades de la salvación. Cristo
es la propiciación por los pecados de todo el mundo (1 Juan 2: 2). La doctrina falsa de que
algunos son escogidos para la perdición, es negada por esta declaración de Juan (ver com.
Rom. 8: 29).
Agua de la vida.
Todo el que desee heredar la inmortalidad está invitado a participar de ella. A todos se
ofrece el agua de vida (ver com. cap. 21: 6; cf. Isa. 55: 1-3).