¿Entiende lo que lee?
28
En efecto, por cuanto la Biblia es la Palabra de Dios, su contenido es
totalmente confiable. Tres mil quinientos años de existencia y su invariable
resistencia ante el sinfín de embates que ha enfrentado, así lo atestiguan.
4
Útil y necesario, el análisis textual es, sin embargo, apenas el inicio del
método exegético que estamos interesados en aplicar al estudio profundo de la
Biblia. Procedamos a conocer entonces el siguiente paso.
Dé importancia al significado y al orden de las palabras
Una vez que tenemos ante nosotros el texto bíblico en la forma más depurada
posible, hemos de adentrarnos en él, en su contenido, a fin de descubrir su
verdadero significado. Una primera forma de lograrlo será seleccionando las
palabras del texto que consideremos más significativas, aquéllas que tienen un papel
clave en el pasaje que deseamos interpretar, ya sea por que se repiten, porque
aparecen en contextos relacionados por el mismo tema, o porque sobresalen en el
desarrollo de la historia del plan de la salvación desplegado en las Escrituras.
Cada una de estas palabras debe ser examinada con el objeto de determinar
su significado.
5
El sentido que debe darse a un término, cuando éste tiene varias
acepciones o posibles significados, puede determinarse aplicando los siguientes
criterios:
1. El significado dado por el propio autor.
2. Por su uso en relación con otras palabras afines (palabras sinónimas o
palabras usadas de manera contraria o a manera de contraste).
3. Y, sobre todo, por su contexto literario-histórico inmediato.
Seguir estos tres pasos nos permitirá concluir, por ejemplo, que mientras la
palabra “fin” (
télos
) se refiere a la culminación de la historia humana en Mateo 28:20,
esta palabra evidentemente tiene otro significado en Romanos 10:4 (conclusión que
confirmaremos en un momento, al analizar más detalles de esta cita).
4
Para más al respecto, revise los cuadros que aparecen en la sección “practique lo
aprendido”, al final de este capítulo.
5
Recuerde que algunas de las herramientas más útiles para esta labor, así como una breve
explicación sobre su uso, aparecen en el capítulo anterior.